Aquí tienes el videotutorial del proyecto y si quieres ver el paso a paso con mayor detenimiento justo debajo lo tienes todo explicado y detallado en el artículo.
Como puedes ver en las imágenes la reja presenta un estado de oxidación bastante avanzado, no ha llegado a perforar el metal pero si está bastante levantado y tiene muchas rugosidades en la superficie. Ha perdido casi por completo el color y tiene un aspecto de vieja y descuidada, así que hoy vas a ver la transformación y renovación por completo de esta reja
Lo primero que tenemos que hacer es eliminar ese óxido. Para ello vamos a utilizar el juego de cepillos de alambre para taladro de Walfcraft. De izquierda a derecha tenemos el cepillo de copa, el de pincel, el de disco y el cilíndrico.
Comenzaremos con el de copa dándole a todo el frontal de la reja, haremos movimientos verticales a lo largo de todos los barrotes y si necesitas incidir más el algún punto lo puedes hacer con el cepillo de pincel.
Los laterales y la zaona trasera vamos a hacerlos con el cepillo de disco, también trabajaremos las zonas del ornamento. Girando el taladro podemos incidir de manera diferente con el cepillo en la reja y llegar a más partes de ella.
Para las huecos utilizaremos el cepillo cilíndrico, es perfecto para estas zonas y cuanta más fricción contra el hierro más rápido y mejor eliminará el óxido. Cuando hayamos terminado, tenemos que limpiar todos los barrotes de restos de partículas metálicas con un paño húmedo.
Toca el turno de pintarla, lo voy a hacer con el esmalte Oxipro de Jotun. El motivo principal es porque es imprimación y pintura al mismo tiempo, por lo que solo voy a tener que utilizar un solo producto para pintar y proteger la reja. Protege de los rayos ultravioleta y de la intemperie.
Los materiales que voy a usar para aplicar este esmalte son una cubeta, una brocha y un agitador de RuloPluma y verás a continuación porque.
Con la punta metálica del agitador abro fácilmente el bote, después lo remuevo aunque en este caso el esmalte viene bastante homogéneo y casi no es necesario y luego lo vierto en la cubeta.
Comienzo a aplicar el esmalte en la reja con la brocha. Realizo movimientos verticales a lo largo de los barrotes y presto atención a los detalles y recovecos que pueda tener. Es un trabajo entretenido, a mi me encanta ver como va cambiando de color la reja y la verdad que el esmalte de Oxipro tiene una cubrición bastante buena.
Mientras se seca esta primera mano de pintura, podemos dejar la brocha dentro de la cubeta para que no se seque gracias al accesorio que trae, el mismo que también funciona como asa cuando la estamos utilizando, haciendo la tarea mucho más cómoda ya que además de su ergonomía pesa muy poco.
Tras secarse la primera capa, le doy una segunda que no solo igualará el tono por completo sino que además le aportará mayor protección. Es increíble como se puede ver ya el cambio.
Aquí puedes ver el antes y el después de las distintas partes de la reja. La verdad que es alucinante como estaba y como ha quedado.
Parece como nueva, con esta capa de protección hemos conseguido alargar la vida de nuestra reja durante muchos años más, ahorrándonos el dinero de tener que sustituirla a corto o medio plazo.
Yo he elegido pintarla en negro porque va a juego con la decoración de la habitación pero tienes a tu disposición muchos otros colores más con los que pintar reja u objetos metálicos.
El acabado es realmente espectacular, hasta en los pequeños detalles, sin duda esta es la mejor opción para la renovación de tu reja.
Y tengo que reconocerte que yo no soy muy fan de las rejas, de hecho tenía pensado quitarlas pero me ha gustado tanto el acabado que se van a quedar ahí por mucho mucho tiempo.
Dime en los comentario que te ha parecido esta técnica para eliminar el óxido y pintar una reja oxidada. Te dejo además esta lista de reproducción donde puedes ver más vídeos de reformas en el hogar que puedes hacer tu mismo.
Fuente: este post proviene de Idea Tu Mismo, donde puedes consultar el contenido original.
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