Todavía queda tiempo para disfrutar de los bulbos en casa, esas plantas con aspecto de cebolla y que sin apenas cuidados especiales dan unas flores irresistibles y muy aromáticas. Pero aunque los conozcas, es posible que no estés al tanto de todas sus posibilidades. Así que hoy te contamos algunas muy interesantes…
Por ejemplo … ¿sabías que los bulbos duran muchas temporadas? Puedes recuperarlos año tras año. Solo tienes que esperar a que termine su floración y el tallo se seque. Si estaban enterrados límpialos bien sin dañar sus raíces ni pelarlos. Envuélvelos en periódico de uno en uno y guárdalos en un lugar seco, fresco y oscuro. Ahora solo queda esperar a que llegue de nuevo su temporada y despierten de su letargo.
Flores todo el año
Y es que aunque los bulbos son plantas perennes, solo florecen en temporadas concretas – otoño, invierno, primavera … Y como todo lo bello, sus flores apenas duran unos días o semanas. Una pena, porque algunas variedades son perfectas para decorar la casa y sería fabuloso poder disfrutarlas en cualquier estación. Pero hay solución y se llama forzar -un nombre nada sugerente por otro lado.
Al parecer, los bulbos pueden florecer en cualquier época del año siempre que piensen que han pasado un invierno muy duro. Sufridores que son. Para conseguirlo, colócalos en la nevera o en un sitio donde la temperatura sea entre 1º y 5º – ojo! solo nevera, nada de congelación!. Los dejas allí una temporada larga (unas 8 semanas para jacintos y unas 12 para tulipanes) y cuando los saques, pensarán que ha empezado su primavera particular. Plántalos cada 15 días y así tendrás flores durante más tiempo.
Pues sí, los bulbos no solo crecen en tierra sino que también lo hacen en agua. Plantarlos es muy fácil y más si usas jacinteras – esos recipientes con la parte superior más ancha para que el bulbo (la cebolla) no toque el agua. Porque ese es precisamente el único requisito imprescindible para que los bulbos se desarrollen en el medio acuático: que su base nunca toque el agua, solo sus raíces. Y aunque tiene el mecanismo de un chupete, te he preparado una infografía con algunos consejos adicionales para que tus bulbos den flores – de lo contrario solo verás crecer los tallos:-)
Reciclaje de menaje y otros enseres
Decorar con bulbos es un ejercicio muy sano de reciclaje. Así podrás reutilizar vajillas de la abuela o piezas sueltas y desparejadas que no estás dispuesto a tirar. Cualquier recipiente de cualquier forma y material es susceptible de alojar estas preciosidades.
Sólo tienes que encontrar su pareja perfecta. ¿La ventaja? que la lista de especies es larga y todas son ideales: jacintos, fresias, ranúnculos, crocus, tulipanes, narcisos, muscari, flores de azafrán, anémonas o nazarenos entre otros.
Son, sin duda, plantas ideales para decorar la mesa baja del salón – bueno, en realidad, cualquier mesa – pues si eliges una variedad no demasiado alta, no interferirán la conversación entre invitados o entre tú y el televisor.
En grupo son mucho más llamativos, aunque puedes hacer estos grupos de dos formas distintas: a) bulbos de la misma especie – o diferentes – bien compactados en un mismo y único recipiente o b) plantados de forma individual pero agrupando sus recipientes – en este caso mejor si éstos son diferentes en forma y altura.
Este post participa en el reto de facilisimo Decoración con plantas de interior. Si te ha gustado y buscas más inspiración síguenos en facebook o instagram. Fotos: Daniella Witte , Ikea y Pinterest
Fuente: este post proviene de Decoralinks, donde puedes consultar el contenido original.
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