La Sansevieria es de origen africano y asiático y durante muchísimos años se dudó si pertenecían a la familia de los Lirios o de los Agaves. Este conflicto finalmente pudo ser resuelto y la respuesta es que pertenecen a la familia de las Liliaceae.
La Sansevieria puede encontrarse en dos tipos principales: altas y con hojas selectas y en forma de espada y, también, de crecimiento bajo y en forma de roseta. Las hojas de cualquiera de los dos tipos son ligeramente gruesas y con marcas atractivas que surgen desde un grueso rizoma que va justo por debajo de la superficie del compost. Recuerda tener mucho cuidado de no dañar las puntas de las hojas, porque si esto ocurriera, la Sansevieria dejará de crecer.
Las flores pueden aparecer en muchas variedades desde mediados hasta finales de verano, no son muy bonitas y duran poco tiempo, pero las brácteas, desde las que crecen, son realmente atractivas y pueden durar varias semanas e incluso a las flores le suceden coloridos frutos.
La más conocida de la Sansevieria es la planta alta, cuya especie se denomina Sansevieria trifasciata. Esta tiene hojas gruesas en forma de espada de color verde con bandas de color más claro que produce flores grises blanquecinas en brácteas. Por otro lado, la variedad Sansevieria trifasciata laurentii poseen márgenes de color verde dorado intenso a lo largo de toda la extensión de la hoja.
La Sansevieria trifasciata hahnii es la más común de las Sansevierias compactas y suele formar una roseta de hojas puntiagudas y ovaladas, de tonalidad verde oscuro dispuestas en forma de espiral y con bandas en color verde claro. Cada una de estas plantas aceptan una amplia gama de condiciones de luz y también pueden tolerar periodos de sequía.
Cuidados en primavera y verano
Si la planta supera la capacidad de la maceta, deberás cambiar un recipiente más grande en primavera, utilizando un compost adecuado. Asegúrate de que la maceta cuenta con un buen material de drenaje. En verano, las temperaturas pueden ascender hasta los 24 °C y la mejor posición es aquella en que la planta disfruta de luz brillante, incluso de pleno sol.
Trata a la Sansevieria como suculenta cuando se trata de riego y deja que el compost se seque y después riégala de manera abundante. Nunca la riegues en exceso, dado que el rizoma está enterrado en el compost y puede pudrirse con facilidad. Cada tres semanas añade un fertilizante líquido al agua.
Cuidados en otoño e invierno
En otoño e invierno, las temperaturas tienen que mantenerse entre los 13 y los 18 °C. Mantén tu planta en el lugar más luminoso posible. Durante esta época precisa de muy poca agua, quizás una vez al mes cuando el tiempo es más benigno. No precisa de ninguna humedad, así que no debes regarla, pero asegúrate de mantener la planta lejos de las corrientes de aire.
Propagación
Cuando las plantas altas tienen 15 cm de altura, y las plantas de la roseta 5 cm, pueden propagarse por división, siendo esto realmente beneficioso si la planta ha crecido demasiado. Divídelas en primavera antes de que comience el nuevo crecimiento. Quita la planta del recipiente y remueve con cuidado todo el compost de las raíces.
Para las plantas altas que tienen hojas en forma de espada, deberás cortar el rizoma con un cuchillo afilado en tres partes, siempre dependiendo del tamaño, dejando un par de hojas y raíces en cada una. Para las plantas que tienen forma de roseta, también tienes que cortar el rizoma, dejando en cada sección uno de las rosetas en crecimientos que ha empezado a desarrollarse a lo largo de los estolones que salen del rizoma principal.
Espolvorea los cortes con azufre en polvo e inserta las secciones en el compost habitual y mantenlas a 21 °C hasta que estén bien establecidas. Las plantas propagadas por división serán siempre idénticas a la planta madre en color y diseño.
Los esquejes de hoja tienen que tomarse en verano cuando la planta ya está creciendo con fuerza. Para hacer esquejes de una hoja, deberás cortar secciones de 5 cm de largo y dejarlas que formen callos. Inserta la mitad inferior de cada sección en compost de cultivo y, las plántulas podrán crecer a partir de las superficies cortadas. Puedes plantar dos o tres en un recipiente de 8 cm y mantener las secciones a 21 °C.
Cabe destacar que con la Sansevieria trifasciata, los dibujos no podrán reproducirse y la planta resultante será de color verde liso. Por tal motivo, es mejor reproducir este tipo de variedad jaspeada mediante división. Si quieres cultivar una especie rara, puedes sembrar las semillas.
En invierno-primavera distribuye las semillas en una mezcla compuesta de tres partes del compost por una de arena gruesa, ligeramente húmeda. Mantén la mezcla a una temperatura de 24 a 27 °C, preferiblemente en un recipiente de plástico cerrado. Cuando las plántulas sean lo suficientemente grandes para manipularlas con facilidad, tendrás que destaparlas y plantarlas de manera individual.
Problemas
Si las hojas empezaran a pudrirse en la base y aparecieran manchas de color marrón, especialmente en invierno, es una señal inequívoca de putrefacción provocada por el exceso de agua. Retira la planta del tiesto, corta las partes del rizoma afectadas y deja que se seque durante algunos días. Elimina las hojas dañadas con un cuchillo afilado, espolvorea los cortes con azufre en polvo y plántalas nuevamente.
Recuerda que no solo deberás regar la planta cuando el compost haya secado. Si las plantas veteadas empezaran a perder sus dibujos y se volvieran verdes, deberás llevarlas a una posición hacer más soleada. Las Sansievierias precisan de muy buena luz para conservar su atractivo veteado. Las manchas blancas en las hojas y velludas suelen provocarse por la cochinilla algodonosa, y las ampollas marrones son una señal clara de un ataque de cochinillas. Para deshacerte de ellas, uso un paño empapado en alcohol metílico.
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Antes de comprarlas te aconsejo que compruebes que las bases de las hojas estén totalmente saludables y que no exista ningún signo de putrefacción. Procura también cualquier posible daño en las puntas y los bordes de las hojas. Las plantas altas que estén desarrollándose en tiestos pequeños, tienden a volcarse, de modo que, si encuentras una planta perfecta en una maceta de plástico, deberás retirarla y plantarla en un tiesto de arcilla.
Cabe destacar que la Sansevieria mejora la calidad del oxígeno de las habitaciones, por lo que es una de las mejores plantas para decorar el cuarto, purificar el aire y dormir mejor.
Imagen cortesía de Baophunuvietnam (http://baophunuvietnam.com/Nha-xinh/Lam-sach-khong-khi-va-lam-mat-khong-gian-nha-ban-voi-cay-xanh-161.html)